Por ordendanza, toda documentación oficial del municipio tendrá una leyenda alusiva
El Concejo Deliberante decidió declarar a 2023 como “40° aniversario del retorno a la democracia”, disponiendo que de manera obligatoria toda la documentación oficial, ya sea en soporte digital como en papel, de todos los ámbitos lleve una leyenda alusiva.
La iniciativa, promovida por el bloque radical, fue aprobada por unanimidad en la última sesión ordinaria, estableciendo, además, que durante 2023 el Departamento Ejecutivo promueva actividades “que contribuyan a la difusión de la importancia de los valores democráticos, su pasado, presente y futuro”. Para esto último promueve que se constituya una comisión, integrada por representantes de los diferentes bloques políticos y del Ejecutivo de las área que el mismo estime correspondan”.
En el texto de la ordenanza se recalca que en 2023 se cumplirá “un hecho de gran relevancia para nuestro país”, como es el 40° aniversario del retorno de la democracia, siendo éste el período de su vigencia ininterrumpida “más largo de nuestra historia como nación independiente”.
En los considerandos se recuerda que “apenas levantada la veda por el gobierno militar, la participación ciudadana se reflejó en diversas concentraciones en sitios eminentemente simbólicos, como la Plaza de Mayo o Plaza Lavalle” en la ciudad de Buenos Aires.
Se destaca también que “los actos de cierre de campaña de los partidos políticos que se presentaban a elecciones fueron un éxito, al reflejar el vigor cívico que se creía sofocado, con participación masiva de la ciudadanía, esperanzada en dejar atrás los oscuros años de la dictadura”.
Luego se indica que “el 30 de octubre de 1983 se celebró finalmente una de nuestras mejores costumbres: ejercer el derecho a elegir y ser elegidos para ocupar cargos públicos y así representar la voluntad del pueblo”.
También se precisa que “el 29 de noviembre se constituyeron ambas cámaras del Congreso Nacional y el 7 de diciembre se proclamaba a los mandatarios electos: el presidente Raúl Alfonsín y el vicepresidente Víctor Martínez”.
Y se menciona que Alfonsín “solicitó asumir el 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos, la fecha que marcaría el inicio de lo mejor de la política: las promesas electorales se transformaban en acciones concretas”.
MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA
Asimismo, se recalca que “el flamante gobierno democrático trabajó activamente para preservar la Memoria, buscar unívocamente la Verdad y llevar Justicia para el pueblo argentino. De allí lo imprescindible para que ello sucediera: el Decreto 158 que ordena el Jucio a la Juntas Militares, el Decreto 187 que crea la Comisión Nacional sobre la Desaparición de las Personas (Conadep), la Ley de Defensa de la Democracia, la reforma al Código Penal para que la tortura pase a ser considerada como uno de los delitos más graves, la Ley 23.511 (Creación del Banco Nacional de Datos Genéticos)”.
Se indica, además, que se establecieron “leyes que ampliaban derechos: la igualdad jurídicos de los hijos e hijas, reforma de la Ley de Patria Potestad, se logró el divorcio vincular” y “en el mismo sentido fueron reconocidos los aportes jubilatorios de los declarados cesantes y/o prescindibles por razones políticas y/o gremiales”.
CONSENSOS Y DISENSOS
Conceptualmente, se reflexiona seguidamente que “las ideas de libertad y consenso, de disenso y respeto por las opiniones de los otros, la defensa de la vida, la paz y la búsqueda contínua, perpetua e inclaudicable de soluciones a nuestras problemas para que no se repita Nunca Más nuestro pasado, son el camino para comprender nuestra historia y honrar la memoria de las víctimas de la dictadura”.
Ampliando el concepto se agrega que se entiende a la democracia “como un bien invaluable e inalienable, como el sistema que permite la coexistencia de lo diverso, la discusión, el enfrentamiento de fracciones con ideas distintas, siempre dentro del ambiente de libertad individual”.
También se sostiene que “la cultura y los derechos conquistados por medio del sistema democrático a lo largo de este tiempo no se sostienen, sino a través de una de las máximas enseñanzas que nos dejara el presidente Raúl Alfonsín: sigan a ideas, no sigan a los hombres. Los hombres pasan, las ideas quedan y se transforman en antorchas que mantienen viva a la política democrática”.
Finalmente, se enfatiza que “la democracia necesita que el conjunto de la sociedad exprese su compromiso representativo y republicano. Es ese compromiso que mantenemos desde hace 40 años, el que nos permite distinguir la trascendencia histórica del presidente Raúl Alfonsín en el reconocimiento transversal de todos los espacios políticos. Porque construyó pensando en qué debería hacerse en ese tiempo histórico, dejando un legado de democracia a largo plazo y en cómo hacerlo para que fuera intrínseca a la cultura política de nuestra sociedad”.
