Acuerdo entre la Región Oceánica y pescadores artesanales

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Coinciden en respetar objetivos de desarrollo sustentable promovidos por la ONU

El último encuentro del Polo Productivo de la Región Oceánica Bonaerense (ROB), celebrado a mediados de este mes en la ciudad de Punta Alta y organizado conjuntamente con el Consorcio de Gestión del Puerto de Cnel. Rosales, incluyó diversas actividades. Entre ellas, la firma de un acuerdo marco de cooperación entre la ROB y la Unión de Pescadores Artesanales Argentinos (UAPA).

En el ámbito  mundial, alrededor del 10% de la población mundial depende de la pesca para su subsistencia. La mayor parte de esta población se encuentra en países del sur y trabaja en la pesca en pequeña escala, que representa cerca del 50 % de las capturas pesqueras totales. La pesca artesanal es altamente productiva y tiene una gran importancia en la seguridad alimentaria, pero además con buenas medidas de gestión, es muy eficaz en el uso de los recursos, convirtiéndose en un modelo que puede ser rentable tanto social como económicamente, contribuyendo a las economías locales.
Dentro de éste contexto, ambas entidades firmaron el acuerdo de cooperación, manifestando también su coincidencia en “adherir, apoyar, difundir y poner en práctica sus acciones según los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS) establecidos por la Organización de las Naciones Unidas; y en respetar y hacer respetar toda acción a favor de la inclusión, la complementación, la colaboración y la solidaridad”.

Sánchez y Roche firman el acuerdo de cooperación entre la ROB y la UAPA

“BALUARTE CLAVE”
El licenciado Miguel Ángel Sánchez, titular del Polo Productivo de la Región Oceánica Bonaerense dijo que “éste acuerdo ratifica los objetivos y las acciones de la ROB y sus entidades miembros. La pesca artesanal, que genera puestos laborales e incluye a ostricultores, marisqueros, pulperos, buzos, algueros y procesadores de captura artesanal, es un baluarte clave en muchas comunidades costeras que necesitan de soluciones profundas e integradas. Pero además, ésta actividad, tan dura como, a la vez, tan noble, junto a la piscicultura y la acuicultura están vinculadas entre sí y esto implica incluir también a otros distritos alejados de las costas marítimas, fluviales o lacustres pero que también tienen oportunidades propias y complementarias”.
Agregó que “en nuestra región contamos también con un valioso aporte que proviene del Estado a través de entidades muy importantes como la UTN Regional Mar del Plata y, puntualmente, su carrera de Ingeniería Pesquera, el INTI, el INIDEP, el SENASA, áreas de gobiernos, etc. Incluso, en materia de asistencia financiera y subsidios existen alternativas muy interesantes a nivel provincial, nacional e internacional para ser destinados a la producción, embarcaciones y artes de pesca, comercialización, sanidad, formación, capacitación, etc., siempre dentro del concepto de inclusión social y compromiso medioambiental”.
A modo de ejemplo, dijo que “en el 2019 se desembarcaron unas 780.000 toneladas de pescado. Con esto, se podría alimentar a casi 40 millones de personas, es decir, a casi toda la población argentina o, mejor aún,
al 50% de todos ellos, 20 millones de personas que, según datos oficiales, son nuestros compatriotas en situación de pobreza e indigencia”.

VOZ DE LOS PESCADORES
Por su parte, Néstor Roche, Presidente de la Unión Argentina de Pescadores Artesanales (UAPA) y, a la vez, miembro de la Comisión Directiva de la Unión Latinoamericana de Pescadores Artesanales (ULAPA), destacó:  “En UAPA somos un equipo de trabajo, un grupo humano de pescadoras y pescadores”, y,
además, agregó: “somos un país con más de 4.000 kilómetros de costa sobre el océano Atlántico y, sin embargo, la gran mayoría de las argentinas y argentinos seguimos estando de espaldas al mar y de sus oportunidades. Mientras en el mundo se consumen anualmente unos 20 kilos de pescado por persona, los argentinos no pasan de los 5 kilos. Mientras el mercado interno sigue siendo bajo, Argentina exporta pescado por unos u$s 2.000 millones por año aproximadamente”.

Roche, que también integra la comisión directiva de la Red Iberoamericana de Pesca Artesanal que representa a más de 20 millones de pescadores de América Latina, Caribe, España y Portugal, expresó que “muchas mujeres y hombres pescadores artesanales en las costas argentinas, ingresan o abandonan la actividad de forma fluctuante. Pero cada vez que vivimos una crisis, mucha gente se vuelca a la pesca como una la salida laboral para sustentar a la familia. Lamentablemente, la pesca artesanal todavía no es reconocida debidamente. Tampoco tenemos plantas que procesen específicamente el pescado artesanal, por lo que esa calidad se pierde entre el resto del pescado”, explicó.
Los pescadores artesanales que venden a plantas industriales obtienen los mismos precios a los que venden los grandes pesqueros, a pesar de hacer esfuerzos mayores y presentar un producto de alta calidad.
“Para nosotros sería fundamental que tanto el Estado nacional como los gobiernos provinciales y municipales apoyen y fomenten al sector pero de forma planificada, constante y coordinada entre ellos y nuestras comunidades, que apliquen normas similares para la misma actividad, sin contradicciones, con un marco legal uniforme, con menos burocracia y más agilidad. Incluso la pesca ilegal y no reglamentada, al generar desequilibrios en todo el ecosistema del cual somos parte también los pescadores artesanales termina perjudicándonos. Por eso, firmar este acuerdo con la ROB para nosotros es muy alentador y muy positivo. Sé que juntos vamos a trabajar muy bien”, concluyó.

Que es UAPA
La U.A.P.A. (Unión Argentina de Pescadores Artesanales), nuclea asociaciones y grupos definidos de pescadores artesanales de la costa marítima Argentina y apoya los intereses de quienes la componen.
Dichas asociaciones y grupos están compuestos por pescadores, ostricultores, marisqueros, pulperos, buzos, algueros y procesadores de captura (derivada de la pesca artesanal) de larga trayectoria y representatividad en el sector. Dentro de los intereses de la U.A.P.A. se encuentra la importancia de difundir la pesca artesanal, el cuidado del recurso para su sustentabilidad y la protección del medio ambiente. Por tal motivo, uno de sus “objetivos sociales” dentro de su estatuto, es la difusión del “Código de Conducta para la Pesca Responsable” de la F.A.O.

Asímismo realiza cursos y talleres de capacitación para el pescador y su familia, intercambios culturales tanto nacionales como internacionales, encuentros y seminarios referentes al tema para los cuales cuenta con el apoyo de diversas organizaciones no gubernamentales. Cuenta también con la colaboración del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), el CENPAT (Centro Nacional Patagónico), el Instituto nacional de Tecnología Industrial (INTI) y universidades.
 

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