Fue realizado por la filial local de la Sociedad de Escritores de la Provincia
Un sentido homenaje a Mario Baroni y Marta Rizzo fue realizado el viernes último por la filial local de la Sociedad de Escritores de la Provincia de Buenos Aires, que tuvo lugar en el Teatro Municipal.
Denominado “Amor por las letras”, el acto contó con la lectura de textos, concluyendo con actuación de integrantes del Instituto Superior de Danzas a cargo de Patricia Aloe.
Además de integrantes de la entidad organizadora, incluyendo a su presidenta Nancy Almassio recién llegada de México, donde desarrolló una intensa actividad cultural, estuvo presente Sandra Baroni, hija de los escritores homenajeados.

Marta Rizzo, docente de profesión, y Mario Baroni, empleado de la Junta Nacional de Granos, no sólo produjeron textos literaios décadas atrás, sino que también desarrollaron una intensa labor cultural.
Marta reactivó la filial local de la Sociedad Argentina de Escritores (SADE), siendo presidenta de la misma, en tanto que Mario impulsó el Monumento al Escritor, que se halla emplazado en el Parque Miguel Lillo, que fuera inaugurado el 14 de junio de 1993. Fue proyectado por el artistas plástico Santiago Giorgi
Marta y Mario participaron de aquel acto de inauguración, a pocos metros del Antiteatro del Parque, ella como referente de la SADE y él como promotor del monumento. Estuvieron, entre otros, el subsecretario de Cultura municipal, Juan Aloisi, así como los escritores Carlos Galván y Antonio Pereyra, entre otros.
Este último, precisamente, al ser entrevistado por el diario digital NQ, reveló haber sido amigo del matrimonio, siendo parte de un mismo grupo literario conformado en los años 80. Incluso Baroni escribió el prólogo del primera libro de cuentos de Pereyra.
Sandra Altolaguirre, integrante de la SEP que participó del acto en el Teatro Municipal, dio testimonio del mismo en sus redes social publicando fotografías e, incluso, un poema de Marta Rizzo de Baroni, titulado “Amanecer”, que reproducimos:
AMANECER
Se oculta la luna, aparece el naciente sol.
Las gotas del rocío se esparcen apuradas.
Trinar de aves,
abrir de campanillas,
Ilanto en las cunas,
susurros de hombres
chirriar de frenos
alegría en muchos ojos tristezas en otros tantos. Parte de la humanidad comienza otro día de vida.
MARTA RIZZO DE BARONI