“Este es un polo turístico de todo el año”, afirmó el doctor Ariel González, indicando que implicará una reactivación del sector comercial y empresarial. Destacó que tuvieron que pasar tres administraciones municipales para llegar a este resultado
La semana pasada, el Ente Vial de Necochea terminó con los trabajos de entoscado en el Paseo de la Ribera, sobre el margen Necochea del Río Quequén, una obra que abarca unos 4500 metros de calle de tierra y que servirá para reactivar el turismo en el sector y ofrecer “mayor conectividad a los vecinos” del lugar, según explicó el propio titular del organismo, Adrián Furno, en el aire de la FM Vinilo 103.5 MHz.
Hablando por los habitantes del lugar, el doctor Ariel González, integrante del grupo de vecinos que desde hace años bregan por el embellecimiento de este recorrido tan característico de la ciudad, afirmó: “Estamos luchando por esto desde el año 2015, pasaron tres administraciones municipales, y haber tenido esta noticia y esta concreción es una alegría”.
“Para nosotros es un polo turístico para todo el año”, expresó en representación de sus pares, y “es algo increíble poder transitarlo hasta con lluvia. Ver la gente como lo disfruta es algo maravilloso”.
Además, el ribereño destacó sobre esta obra, que contó con una inversión por parte del municipio superior a los 10 millones de pesos y para la que se necesitaron unos 8200 metros de tosca, que es un aliciente para toda la actividad comercial del lugar e implica una reactivación de locales gastronómicos, cabañas y complejos, debido a que el turista “no va a pasar ningún momento de apremio o de angustia” para llegar hasta el destino.
Contestando a Jorge Gómez, conductor de Voces de la Ciudad sobre la posible complementación de este trabajo con otro de iluminación, González señaló que “sería el combo perfecto”, y reveló: “Creo que también es un desafío del Intendente (Rojas), que siempre ha estado al lado nuestro. Es el desafío de transformar el turismo en la ciudad”.
Finalmente, el vecino señaló que “ya tenemos la señalética preparada: los carteles de velocidad máxima y de badenes, que son los drenajes de las calles pares que dan al río”, adelantando que “la idea es aportar nuestro granito de arena y hacerlos (los badenes) de material, para que se conserve esa altura y no se horaden demasiado en una lluvia torrencial”.