Incertidumbre ante la finalización de la concesión del elevador portuario
A menos de un mes de concluir la concesión del elevador portuario, que desde 1992 está a cargo de la empresa Terminal Quequén, y ante la falta de certezas respecto lo que ocurrirá a partir del 23 de noviembre, es creciente la incertidumbre que viven los trabajadores respecto de su futuro.
El gobernador Axel Kicillof aseguró ayer que el elevador continuará funcionando, aunque no precisó en manos de quién. No obstante, garantizó la continuidad de las fuentes laborales.
No precisó Kicillof si se prorrogará la concesión, si se hará un nuevo llamado a litación o qué otra determinación se adoptará. Sólo deslizó, en una improvisada conferencia de prensa que se discute qué es “lo más conveniente para el Consorcio, el Puerto y la comunidad».
Pocas horas antes, la Asociación de Terminales Portuarias, encabezada por su secretario general Daniel Monjes, dialogó con algunos medios locales, luego asamblea, contando con el respaldo de otros gremios. Entre ellos el SUPA, conducido por David Alvarez, y el Sindicato de Empleados de Comercio, liderado por Cristian Arriaga.
“No nos importa quién sea el empleador, lo que queremos es que se garantice la continuidad laboral”, fue la frase más reiterada por los dirigentes, entre ellos Diego Iriarte, integrante también del gremio encabezado por Monjes.
Diego Iriarte, por su parte, apuntó que, advirtiendo esta situación, en agosto pasado hicieron entrega de una nota al presidente del ente portuario. La respuesta, por carta, fue que los empleados de Terminal Quequén seguirán teniendo trabajo
Cristian Arriaga bregó para que haya certidumbre respecto del futuro de estos trabajadores, asegurando también el acompañamiento de su gremio a los mismos.
Poco tiempo atrás la legisladora bonaerense Natalia Sánchez Jauregui presentó un proyecto a través del cual se propone que este elevador portuario, que antiguamente pertenecía a la Junta Nacional de Granos, vuelva a estar en manos del Estado.
Fue en el año 1992 que se adjudicó la concesión del elevador a la empresa Terminal Quequén. En aquel entonces el mismo estaba en manos del Estado nacional, pero posteriormente se hizo el traspaso a la Provincia.
Luego de tres años de gestión como gobernador, Kicillof no fue claro este martes en Quequén, donde inauguró el edificio propio del Jardín N° 908, qué medidas se adoptarán en cuestiones vinculadas con el puerto, ya que no sólo no dio definiciones del futuro del elevador a cargo desde hace 30 años de Terminal Quequén, sino que también cuestionó el funcionamiento de los consorcios de gestión, reconociendo que su modificación escapa a la Provincia, ya que fueron creados a través de la Ley de Puertos, de carácter nacional.
